18 De Diciembre, día Internacional de la Esclerosis Múltiple (EA), una enfermedad neurológica crónica que afecta a 47.000 personas en España y cada año se diagnostican 1.800 nuevos casos, según datos de la Sociedad Española de Neurología (SEN) quien alerta que el número de afectados se ha duplicado en las dos últimas décadas.

La EM es una enfermedad autoinmune inflamatoria desmielinizante de causa desconocida y curso crónico causada por el daño a la mielina, un material graso que aísla los nervios, actuando como la cobertura de un cable eléctrico, que permite que un nervio transmita sus impulsos rápidamente. En la EM, la pérdida de la mielina (desmielinización) se acompaña de una alteración en la capacidad de los nervios para conducir impulsos eléctricos desde y hacia el cerebro y esto produce los diversos síntomas de la EM, (Ilustración 1). Dependiendo del grado de la lesión, la falta de comunicación entre las neuronas puede ser transitoria, sucediendo durante un tiempo para luego recuperarse, o permanente. Los lugares donde se pierde mielina (placas) aparecen como zonas endurecidas (cicatrices), que en la EM aparecen en diferentes momentos y en diferentes áreas del cerebro y la médula espinal.

En los últimos años tanto la incidencia como la prevalencia de la esclerosis múltiple han aumentado, hasta el punto de que en las últimas dos décadas, el número de pacientes con esclerosis múltiple se ha duplicado.

Existen varias formas de presentación y evolución de la esclerosis múltiple,  y los síntomas de la enfermedad varían enormemente, desde la debilidad o la afectación de la visión, al dolor y la fatiga. Estos síntomas afectan significativamente a la calidad de vida de un gran número de pacientes y provocan un gran impacto social.

La Federación Mundial de Terapeutas Ocupacionales (WFOT) define a la Terapia Ocupacional como una profesión que se ocupa de la promoción de la salud y el bienestar a través de la ocupación. El principal objetivo de la terapia ocupacional es capacitar a las personas para participar en las actividades de la vida diaria.

Por lo tanto, la terapia ocupacional es una parte fundamental del proceso de rehabilitación para lograr el mayor grado de funcionalidad, autonomía e independencia y así mantenerlo todo lo posible en el tiempo, mejorando su calidad de vida.

Todos los objetivos terapéuticos están orientados a mejorar las actividades de la vida diaria, por lo tanto, se diseña y se lleva a cabo un plan de tratamiento enfocado a reducir los síntomas como la fatiga, rigidez muscular, alteración sensorial, coordinación y equilibrio.

También cabe resaltar como es lógico, la importancia durante el proceso de tratamiento de otros departamentos como fisioterapia, logopedia, psicología, neurología, etc., para conseguir una mejora en la vida diaria del paciente que incluye aspectos psicológicos, sociales, familiares y de salud.

Contactanos
¿Necesitas ayuda?