Uno de los servicios que ofrecemos en nuestros centros de día en Madrid es el de rehabilitación de Parkinson en personas mayores. Uno de los síntomas que puede aparecer, especialmente en estadíos avanzados de la enfermedad, es el bloqueo de la marcha. También se conoce como freezing o fenómeno de congelación. Quien lo sufre suele describirlo como la sensación de tener los pies “pegados al suelo”. Cuando quieren comenzar a caminar se sienten incapaces, sin embargo una vez comenzada la marcha ésta suele ser fluida. Esto sucede porque el inicio de la marcha es un movimiento voluntario, que activa unas vías del sistema nervioso, que son las que están dañadas en la enfermedad de Parkinson; el caminar, sin embargo, es un movimiento automático que activa otras vías nerviosas, no alteradas por la enfermedad. Es frecuente que los bloqueos aparezcan no sólo en el inicio de la marcha sino ante los cambios de dirección, los giros, al llegar a sitios estrechos o en los marcos de las puertas, que igualmente son movimientos voluntarios y no automáticos. Hoy proponemos una serie de estrategias para salir de estas situaciones de bloqueo para prevenir caídas y para un día a día más fácil.
¿Qué hago cuando me siento bloqueado?
- Balanceo: consiste en trasladar el peso del cuerpo de una pierna a otra varias veces (3 ó 4 es suficiente) y sin perder ese ritmo empezar a caminar. La idea es cargar sobre una pierna para liberar la otra, lo cual ofrece excelentes resultados.
- Ritmo: el ritmo es una ayuda para el movimiento en personas con Parkinson. Usar un metrónomo o dar palmadas de forma constante da un ritmo y es una referencia que facilita el inicio de la marcha ante el “freezing”.
- Contar: siguiendo con la idea del ritmo, el propio afectado puede comenzar a contar (1-2-1-2 ó 1-2-3-4-1-2-3-4) al tiempo que comienza a dar los pasos.
- Música: escuchar música y empezar a caminar o bailar es un fenómeno que ayuda a evitar los bloqueos y a salir de los mismos. Muchas personas usan los cascos y se ponen música durante los desplazamientos consiguiendo un movimiento más fluido.
- Estímulo visual: colocar líneas en el suelo de casa (con cinta adhesiva por ejemplo) e intentar superarlas o pegar huellas para intentar pisarlas es otro modo de comenzar la marcha. Igualmente sirve colocar objetos, como aros o bastones y saltarlos. En la calle será útil intentar pisar sólo las rayas del paso de cebra.
Como decíamos, la dificultad ante los bloqueos es comenzar a caminar, una vez dado el primer paso, con la ayuda de alguna de estas estrategias, se activa el programa automático de la marcha. Cada persona debe encontrar la estrategia o estrategias que más le ayuden y por supuesto nuestro equipo de expertos en Parkinson está a su servicio para dar con la mejor solución.
Autor: Irene Pérez Sierra